lunes, 28 de marzo de 2016

Quizás lo más difícil de todo sea dejar de escribir sobre ti.

Todavía me pregunto cada noche dónde estarás, si seguirás ahí, en algún lugar, pensando que seguimos mirando la misma luna. Desde que te fuiste todo se hizo complicado, y no puedo dejar de preguntarme si todavía leerás mis textos, si recordarás los momentos que vivimos, las palabras que nos dijimos. Algo dentro de mí todavía me dice que nuestros caminos volverán a cruzarse. Ya sabes más que de sobra que no creo en las casualidades, que creo que todo pasa por algo. Es complicado seguir adelante como si nada cuando pierdes a alguien que ha sido parte de tu vida todo este tiempo. Es difícil creer que no volverás, que no escucharé más tu voz, ni tu risa. Porque hay canciones que todavía me recuerdan a ti. Todavía recuerdo el día que me dijiste que pensar que nuestro caminos volverían a cruzarse era una excusa para cobardes. El tiempo pasa y te echo de menos. Cuando te perdí, algo en mi se marchó contigo. Parte de mi inocencia y de mi dulzura se fueron. Todo perdió el sentido. Tuve que reconstruirme y aprender a estar sin ti, pero estés donde estés, espero que sepas que todavía te llevo conmigo, aunque sea en mis recuerdos. Porque gracias a ti aprendí a salvarme yo sola, a no necesitar a nadie más que a mi misma. 


Photo source: Sara Herranz