jueves, 29 de septiembre de 2011


Me senté. Hacía tiempo que no iba a visitar a mi padre. La verdad, cada vez tenía menos ganas de ir al cementerio, no me gustaba, pero sabía que ya era hora de ir. Ya hacía 3 años. Intenté relajarme, siempre me ponía nerviosa cuando sabía que tenía que ir de visita. Cogí el libro, me lo había regalado él. Siempre me gustaba llevarlo encima, era como un amuleto, me daba las fuerzas que me él me arrebato para poder afrontarlo todo sola. Cogí mis llaves de la mesita de noche y metí el paquete de malboro en el bolso. Me sentía vacía. Salí de la habitación. Me picaban los vaqueros, pues estaban rotos, muy rotos, al igual que mis medias, rotas. Me miré en el espejo del baño, llevaba mi largo pelo negro sucio y un poco grasiento. Hacía ya 3 años que había perdido la sonrisa de la que siempre hablaba ella. Bajé las escaleras y la vi. Se había quedado dormida en el sofá después del turno de anoche. Le di un beso en la frente. Mi madre también hacía 3 años que no sonreía.
Hay ocasiones en las que la vida es como un tablero de ajedrez. Tienes que calcular cada paso, cada movimiento. Un error más, una ficha menos con la que continuar el juego. Pero cuando te das cuenta de que estas perdiendo la partida, y con ella a ti mismo, entonces, es cuando hay que hacer un movimiento arriesgado con el que o ganas la partida, o lo pierdes todo.

martes, 27 de septiembre de 2011

Le concert

Je me suis préparé
Pour monter au stade.
J´ai écouté
Les fans chanter
Et je me suis crispé.
Deux minutes
Avant de commencer.


Une main dans les cheveux,                                                
Et une autre fois
Un regard
Dans le miroir
Pour vérifier
Que tout était parfait.
Une minute
Avant de commencer.
                                                                                                              
Tout le monde
A crié mon nom.
Mes mains
N´ont pas cessé de trembler.

J´ai touché

Mon amulette.
J´étais prêt
C´était l´heure de commencer.

C´est à ce moment,
Quand tout le monde me regarde
Que mon cœur exploite.



jueves, 8 de septiembre de 2011

Hay veces en que nos quejamos, dejamos que nuestros defectos nos consuman. Decimos que somos feas, que estamos gordas... Pero todo por no darnos cuenta de la realidad. De que hay gente que esta peor, que de verdad está mal. Un accidente, y puedes perderlo todo; un brazo, las piernas, desfigurarte la cara... Y aun así siguen adelante, luchando, siendo más fuertes y sufriendo más de lo que cualquiera que lo vea desde fuera pueda llegar a imaginarse, y siguen. Resisten a todas las tormentas y piedras que les arroja la vida. Siguen esforzándose, sin perderse a sí mismos y luchan. Y nosotras decimos tener problemas? Lo siento, de verdad, pero me temo que no.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Esta noche, solo quiero que te lo quites todo.... Solo tu y yo, no necesito nada más, solo que seas mío.



Hay días y noches, en los que la distancia parece mucho más grande. En lo que solo hay ganas de huir, de salir corriendo, pero no se que rumbo tomar. Quiero coger su mano, agarrarla fuerte y escapar, correr hasta que mis piernas no puedan más, hasta liberar mi mente. Chillar, llorar, desahogarme, una vez más, de aquello que me está encadenando.

lunes, 5 de septiembre de 2011

¿Alguna vez habéis sentido esas mariposas en la tripa cuando te pierdes en su mirada? ¿Esa sensación de que te va a explotar la cabeza cada vez que te besa? No se, es un cumulo de sentimientos que no cambiaría por ninguna otra sensación en el mundo. Me vuelven loca sus caricias, sus besos, la forma en la que me mira, y como sé que sabe que soy toda suya. Que con una mirada me derrito, la forma en la que se que desea mis labios una vez más, su olor en mi piel, su sabor, la suavidad de su piel bajo mis dedos, como me empuja y sabe que me encanta que tome el control. ¿Que decir, aparte de que me vuelve loca, de que no esperaba tener a alguien así a mi lado y de que estos dos meses a su lado he sido la persona más feliz del mundo? No se, quizás, y tan solo quizás deba decir que le amo.


Solo una mirada a mi me da la vida, saber que hay una persona ahí por ti. Dispuesto a estar a tu lado, a aceptar tus errores y a ayudarte a encontrar la forma de ser feliz, sin darse cuenta de que él es tu felicidad. Saber que sin él no eres nada, que cada noche el oír su voz hace que puedas dormir, sabiendo que pase lo que pase va a seguir ahí, a tu lado, pese a la tormenta, dispuesto a derribar barreras. Sentirse querida de esa forma no tiene precio, no tiene forma de expresarlo, pero a veces con un "te quiero" llegas a acercarte a lo que en realidad sientes. No se gente, creéis que me he enamorado? Yo creo que sí, y de la mejor persona del mundo.


domingo, 4 de septiembre de 2011

Son pequeños detalles, en ocasiones apenas perceptibles, pero que te hacen sentir completa, especial, única. Cuando no quiere dejarte marchar y coge tu mano entre las suyas y la aprieta fuerte, deseando quedarse así, cogido de tu mano. Cuando andas delante de él y de repente agarra fuerte tu cintura, te gira y te besa sin previo aviso. O cuando os estáis besando, dejados llevar por la pasión y notas como pone su brazo entre tú y la pared para que estés más cómoda. No sabría describir esa sensación cuando te coge entre sus brazos, cuando su mano reposa sobre tu cadera y tú sabes que desea bajarla más, cuando te da los buenos días , te mira y te dice, "ves, siempre estás preciosa". No se, puede que sea amor, no creéis?


+Quiero llevarte a un sitio especial, pero hay que andar mucho. No te importa verdad?

-No, no me importa. Ya sabes que mientras tú sujetes mi mano, yo andaré hasta el final del mundo si es necesario, porque te quiero, lo sabías?

+Claro pequeña, y no olvides, que no te soltaré nunca.


jueves, 1 de septiembre de 2011

Y es en ese mismo momento, cuando la oscuridad llena la habitación y las lágrimas llenan tus ojos y resbalan por tus mejillas cuando te das cuenta de lo ciega que estabas al pensar que no te estabas enamorando. Cuando pensabas que cada recuerdo no sería lo más importante. Cada vez que dudabas de uno de sus "te quiero" y pronunciabas tú, cada una de las palabras que él deseaba oír. Es entonces, cuando todos los recuerdos te envuelven, cuando su olor, sus brazos, sus manos, se repiten en tu mente, cuando te das cuenta, de que indudablemente, estas enamorada, y de que ahora, ya es demasiado tarde para evitarlo.