viernes, 27 de diciembre de 2013

Si no arriesgas no ganas. Si no pierdes no valoras. Si no sufres, no descubrirás los que significa ser feliz.

Dicen que empiezas a valorar lo que tienes cuando lo pierdes, pero yo no creo que sea así. Sinceramente, puedes tener algo y valorarlo y al perderlo simplemente sentir el dolor y el vacío que deja al irse. Sin embargo es al perderlo que dejamos un lugar para algo nuevo. Quizás las heridas tarden en sanar, o al principio no encontramos nada que llene los huecos que se quedan en el alma, pero llegará el día en que algo o alguien vuelva a sacarte una sonrisa. Solo entonces te darás cuenta de que no hay ninguna pérdida de la que no nos recuperemos. Al contrario, hay algunas pérdidas que nos llevan a descubrir lo ciegos que hemos estado ante lo que antes teníamos. Con ellas llega la liberación. Hay cosas que creemos que nos hacen felices, pero simplemente nos están quitando libertad. A veces no nos damos cuenta de que la felicidad que buscamos, nos la quitan aquellos a los que amamos.


lunes, 11 de noviembre de 2013

En cuanto nos descuidemos habrán pasado los años y poco habrá que nos recuerde estos momentos. 

Como adolescentes nuestra prioridad no es el paso del tiempo. No nos imaginamos envejeciendo y pensamos que aún queda mucho para casarnos y tener hijos. El tiempo ante nuestros ojos pasa lento. Nada importa, nos queda tiempo. Pero de repente te paras a pensar y te das cuenta de que vuelan los años. Que aquella entrada en primero de la ESO parece haber sido ayer. Que hay momentos que definen nuestro futuro. Y ya no queda tiempo para seguir pensando. Hay que tomar decisiones como adulto, cuando ni siquiera somos capaces de decidir que nos apetece desayunar. Nos piden que definamos nuestro futuro con apenas dieciocho años. Pero quizás lo peor de todo no sea elegir, si no dejar atrás a todas esas personas que nos acompañan. Durante los primeros diecisiete años de nuestra vida se forjan amistades que creemos que durarán para siempre pero no podemos estar más engañados. Cuando nos demos cuenta ya no quedarán conversaciones, ni risas, ni noches de fiesta. Es por ello que tenemos que darle importancia a cada momento que pasamos con las personas que son importantes para nosotros, porque en un abrir y cerrar de ojos puede que ya non estén, que se hayan marchado lejos, y las cosas no volverán a ser como antes. Los momentos que vivimos ahora, no los podremos recuperar nunca así que más vale no malgastar el tiempo y disfrutar de cada instante antes de que se desvanezca.


domingo, 13 de octubre de 2013

Derramaré mis sueños si algún día no te tengo.

Hay temporadas en las que solo sobrevivir se hace duro. Es duro tener a quien quieres lejos, sentir que puedes perderlo cada día, sin previo aviso. A veces no nos queda otra que tirar hacia adelante. Cuesta no pensar en el dolor de no tenerte cada día. Cuesta estar tan lejos. A veces estar lejos de la persona que quieres no solo es cuestión de kilómetros, a veces puedes tenerle al lado, y que parezca que vivís en diferentes mundos. Cuando las palabras pierden su significado. Cuando los 'te quiero' ya no te provocan las cosquillas en la barriga. Entonces es cuando todo parece ralentizarse. Cuando todo pierde significado. Si alguien te importa, díselo. No pierdas el tiempo con aquellos que quieres, nunca sabes cuando se acabará todo. Vive cada día, tómate los problemas con calma. Cuando todo parezca ir mal, respira, cierra los ojos y sonríe. Cuando abras los ojos, cambia la perspectiva y tu formas de ver las cosas. Los problemas son siempre más pequeños de lo que creemos. Pase lo que pase, mantente fuerte, sobrevivirás, lo harás. 



domingo, 8 de septiembre de 2013

Nunca se supera la pérdida de aquellas personas que lo han sido todo.


Es lo que en sí conlleva amar. Cuando esa persona ya no está. Cuando por circunstancias, el destino te arrebata a quien es irreemplazable, sientes un vacío que difícilmente volverá a llenarse. Se aprende a vivir con ese vacío. En algún momento, con el paso del tiempo, dejamos de prestarle atención. No lo olvidamos, sabemos que está ahí, pero simplemente dejamos espacio en nuestra mente para no sentirlo tan dentro. No queremos pensar. No queremos recordar porque los recuerdos solo hacen daño. Dejan un sabor agridulce que difícilmente se puede ignorar. Mientras, para los demás la vida sigue, como si para el mundo tu perdida fuese irrelevante. Encuentras apoyo en quien estuvo ahí siempre. En aquellos que con su ánimo, consiguen sacarte esa sonrisa que aunque no sea de felicidad sirve para acallar, aunque sea un instante, el frío que te congela el alma. Los pequeños detalles te traen recuerdos a la mente, cosas imposibles de olvidar. A veces hay que pararse a valorar lo que tenemos porque podemos perderlo todo en un abrir y cerrar de ojos, y puede que lo perdamos para siempre. Pero cuando amas, te arriesgas a perderlo todo. 

lunes, 19 de agosto de 2013

Hace tiempo que dejé de entender como funcionaba esto.

Cansada de luchar por quien no merece la pena. Harta de dar de mi y no recibir nunca nada a cambio. Ya no puedo seguir aguantando. No voy a seguir engañándome. No voy a seguir arrastrándome. Voy a empezar a vivir sin pensar en nada. Voy a ser yo en estado puro. Nadie me va a decir que está bien o mal. Voy a empezar a judgar las cosas yo. Voy a disfrutar a mi manera. Cansada de seguirte, de buscarte. Cuando quieras algo vendrás a buscarme. Ya estoy cansada de esperar algo que no llega. De esperar a alguien que desde un principio se que no aparecerá. Hay que dejar atrás a quién no supo quererte y abrir las puertas a quien está dispuesto a cambiar el mundo por ti. El rumbo como la inspiración en ocasiones se pierden, pero a veces, y solo a veces, encontramos a alguien que vuelve a darle sentido a todo. Es entonces. cuando lo encontramos, que es como la pieza del puzzle que no acababa de encajar que por fin encuentra su lugar. Tú te has convertido en ese algo, que hace que cada día, el mundo tenga sentido.


martes, 4 de junio de 2013

De un día para otro todo ha cambiado. 

Pierdes a quien te quiso de verdad por quien promete aprender a amarte. Cambias deseos por cumplir, por esperanzas vacías.  Cambias un gran amor, por un amor pasajero. Cuando te das cuenta de que has dejado marchar a quien te supo amar, a quien te respetó y te hizo sentir especial cada día; te das cuenta de que es esa persona la que te ha cambiado. Que con su marcha no volverás  a ser la de antes. Que aunque vuelvas a querer, ningún otro será como él. El primer amor no vuelve nunca y duele tener que dejar atrás no solo a quién amaste, sino también el cariño, el amor y la amistad. Porque si amaste de verdad, no se puede fingir que no queda nada. 

Aquí dejo una pequeña nota al chico al que dejé marchar:
Sabes que si me necesitas, estaré aquí cada día. Tú me enseñaste lo que era amar y sufrir por amor. Me enseñaste que aunque no siempre todo sea perfecto tengo que aprender a sonreír y ser fuerte. Me prometiste que siempre estarías ahí y yo sé que es verdad y te prometo que siempre te querré. Las cosas se me han ido de las manos, tú lo sabes, te he dejado marchar. Con esto no te digo que me arrepiento, te digo que me duele tu pérdida. Que hay noches en las que desearía que todo fuese como antes, solo tú y yo. Que cada día que no estás, siento que falta un pedacito en mi. Solo quiero que sepas que puede que algún día nos volvamos a encontrar, y ese día no volveré a dejarte marchar. Espero que de vez en cuando pienses en mi, y que cuando pase la tormenta, sonrías con mi recuerdo. Te quiero, eso no lo olvides. 


Gracias por estos años, por no dejar de estar a mi lado. Gracias por ayudarme a ser quien soy.  Come what may.

jueves, 16 de mayo de 2013

Transiciones.

Momentos de cambios y de tomar decisiones. De aceptar el pasado y afrontar el futuro. Durante mucho tiempo me he sentido perdida, sin rumbo y a día de hoy puedo decir que aún no me he encontrado a mi misma. Me he buscado en personas, en sentimientos, en aquello a lo que llamamos 'amor'. He derramado lágrimas en hombros que no me merecían y he confiado secretos a quien no supo cerrar la boca. Confié en quien decía que ser para siempre y me derrumbe por cosas que no merecían la pena. La madurez te abre los ojos, o eso dicen, pues aún me siento niña. Veo las agujas empezar a romper mi burbuja, dejando que me envenene el aire de fuera: eso a lo que llamamos realidad. Cierro los ojos con fuerza pero cuando los abro nada ha cambiado. Los sueños ahora son pesadillas. El corazón se me acelera y no es por las mariposas en la tripa. Los arañazos no son de lujuria, si no de castigo. La comida no es placer, si no subsistencia. El amor no es amor, es simple y llanamente destrucción. 



jueves, 2 de mayo de 2013


El amor, si es de verdad, no importa sexo, edad, distancia o religión. Si es amor, es amor y punto.

Estoy cansada de los tópicos. De las historias de amor de las películas. ¿Por qué encerrarse en eso si la realidad puede ser más bonita; más intensa? Pese al dolor, el sufrimiento por amor yo lo calificaría como precioso como poco. En ese dolor se refleja todo el amor que uno siente, cuanto más potente es, más se ama o se ha amado. Y pese al dolor, tiene tantas cosas buenas que llegan a ser incontables. Las caricias que hacen que se pongan los pelos de punta y la carne de gallina. Los susurros. Las respiraciones por el cuello. Las primeras citas, los primeros besos. La forma en la que te mira. Esos nervios que se acumulan en la tripa. Los escalofríos. El cúmulo de sentimientos que hacen que cada día ese amor te de fuerzas para seguir luchando por alguien, aunque sea un imposible. En ti encontré mi fortaleza y mi debilidad, mi ansia y mis ganas de luchar, te quiero. 


viernes, 12 de abril de 2013

El ser feliz está sobre valorado.

No todo lo que encontramos día a día nos hace sonreír. Hay momentos de frustración que te dan ganas de encerrarte y no volver a salir. Se fuerte. Cuando todo se va a la mierda y te ves encerrado en un túnel donde no hay salida alguna. Aguanta, la hay, solo que a veces somos nosotros mismos los que bloqueamos la salida. No es fácil ser feliz, nadie dijo que lo fuese. Parte de la felicidad se va cuando se deja atrás la inocencia infantil y empiezas a darte cuenta de lo que es el mundo en realidad. No por ello tenemos que dejar de divertirnos. Ser feliz no lo es todo en la vida, sino que el propósito es lograr esa felicidad. Es una lucha constante del día a día. Hay días que nos encontramos más cerca y días en los que parece que no la lograremos alcanzar. Aún así yo tengo algo claro, cada día es diferente, es especial en algún sentido. Quizás sea el color del cielo, o una mirada compartida en un metro pero, a veces, es el más mínimo detalle el nos lleva a estar mucho más cerca de ser felices de lo que creemos. 


martes, 9 de abril de 2013

A veces un impulso, una atracción nos lleva al camino adecuado.

Hay momentos en los que las cosas no salen como nos gustaría. Nos rallamos,  nos metemos en movidas y en lugares que desconocemos. Puede que no salgamos bien parados pero puede que por equivocación, la vida nos sorprenda con algo bueno. Si no es la persona correcta, detrás vendrán muchos más. Si deja de hacerte sonreír, habrá quien te haga reír a carcajadas. A veces el camino correcto no es el adecuado. Nunca te arrepientas de un paso mal dado, pues si llegaste hasta ahí, por algún motivo sería. No pierdas nunca la esperanza, cuando no hay nada es lo único que queda. Encuentra en cosas insignificantes el valor de la vida, su dulzura, su magia. No dejes de sentir que vives por algo y no por alguien, que vives para alcanzar tu felicidad, no para satisfacer a nadie. Recuerda que solo se vive una vez y las oportunidades no están para rechazarlas. Que a lo mejor si te lo piensas dos veces las oportunidades desaparecen. Pero en ocasiones si atrapas la oportunidad al vuelo y sin pensar nacen historias dignas de ser contadas. Si, a veces un error se puede convertir en lo mejor que nos ha pasado en la vida.


domingo, 3 de marzo de 2013

No te mientas a ti mismo. No te dejes engañar.

Cuando nos intentamos convencer a nosotros mismos de algo no siempre funciona. Un 'todo va bien' entre lágrimas no alivia el dolor del corazón. Un 'ya no le quiero' no soluciona que pienses en él a cada minuto. Para superar algo, el primer paso es admitir que hay algo que superar. Una vez esto esté claro, todo está en encontrar la fuerza, sacarla y saber que nada ni nadie va a cortarnos las alas. A veces hay que luchar por salir a la calle con una sonrisa cada día, porque cuesta. Pero también hay que pararse a pensar en esa gente que de verdad nos quiere, que día a día nos demuestra que valemos mucho que somos más fuertes de lo que creemos y de que el dolor del corazón se irá. Tenemos que pensar que todo se supera y que el mal de amores el tiempo se lo lleva. Hay que continuar con ganas de enamorarse. Y lo más importante, nunca hay que perder la esperanza y las ganas de luchar. Siempre nos quedará algún motivo por el que seguir soñando.


Esta entrada va con especial dedicación a esa personita que esta pasando una mala racha. A mi me tienes aquí para todo, te quiero mvm.

sábado, 23 de febrero de 2013

A veces huir no es la forma de solucionar los problemas.

Todos nuestros fantasmas del pasado vuelven con ganas de jugar. Su diversión es nuestro dolor. A veces queremos salir corriendo, no volver nunca. Nos tranquiliza la idea de desaparecer, de que nadie vuelva a saber de nosotros.
Me encanta imaginarme la idea de empezar de nuevo: sin conocer a nadie, sin que me juzguen, sin nada por lo que arrepentirme ni motivos por los que seguir sufriendo. Me gusta pensar que habrá algún lugar en el mundo en el que, cuando esté allí, todas las piezas del puzzle encajen y todo cobre sentido. Donde haya un porque. Un porque a mis aspiraciones, a mis sueños. Un lugar donde hayan respuestas a todas las preguntas. Donde pararse a pensar sea placentero y no una forma más de tortura.
Buscamos ese lugar en el que ser uno mismo tan solo te lleve a que haya quien te acepte. En el que nadie sea mejor ni peor que el resto, en el que no haya falsedad y se pueda ser feliz. Buscamos un lugar en el que amar y confiar no sean imposibles.


domingo, 17 de febrero de 2013

A veces un solo instante, unas palabras, cambian el rumbo de las cosas.

No siempre todo va como nos gustaría. A veces incluso dejamos de intentarlo. No queremos luchar sin sentido, mirar hacia adelante sin un verdadero rumbo fijo. A veces no todo es tan sencillo como un si o un no. Las cosas no son solo blancas o negras. A veces una persona te cambia de un momento a otro. Llega a tu vida como si cupido te atravesase el pecho con una de sus flechas. Quieres arrancártela  pero la herida es ya demasiado profunda. No sabes como o que te ha llevado hasta ese mismo lugar y con esa persona, pero quieres parar el tiempo y disfrutar de esa manera en la que te hace reír. Te das cuenta cuando se acaba que ese momento ha sido único y efímero y que no volverá a repetirse. Que se ha terminado. Que como llegó se ha ido. Quieres parar el mundo y no sabes como. Sientes que hubo alguien que por un instante te llenó, te hizo olvidar problemas, te hizo no pensar en el 'que dirán'. Alguien que te miró con dulzura y con cariño, pero que en el brillo de sus ojos viste reflejado algo más que todo eso. Alguien que te hizo sonreír de verdad.  




miércoles, 13 de febrero de 2013

La cordura es en sí una simple transformación de la locura.

Hay momentos que solo se pueden vivir cuando estás enamorado. Son esas caricias que hacen que se ponga la piel de gallina que van mucha más allá de lo sexual. Ese momento en el que te rompes sin motivos por echar tantísimo de menos a esa persona. Esa necesidad de estar ahí, apoyándole  demostrando que pase lo que pase puede confiar en ti. Poder llorar sabiendo que en él o ella encontraras consuelo, que te entiende, que te escucha. Todos tenemos amigos, personas que nos ayudan a superar el día a día, pero hay veces que el amor consigue ir más allá. Pasan los días sin encontrar a ese alguien especial. No busco un amor como el de Romeo y Julieta, ni necesito ser como Rose DeWitt buscando a mi Jack Dawson. No necesito un amor de película ni que todo sea perfecto. Necesito encontrar a alguien dispuesto a amarme y a aceptarme sabiendo que no soy perfecta, que yo también cometo errores, pero que pese a todo soy persona. Alguien que me ayude a justificar mis cambios de humor y que me haga rabiar pero acabe a carcajadas. Solo busco alguien que cuando esté con él, me haga sentir especial. A fin de cuentas, yo creo que no pido tanto.


jueves, 7 de febrero de 2013

No me acostumbres a ser especial que cuando te vas me destrozas.

Es como dejar de respirar. Como si te diesen un puñetazo que te robase el aire. Tú te vas y todo te da igual. La que llora soy yo. La que vive sin ganas de seguir luchando soy yo. La que cada día se pregunta si merece la pena moverse de la cama, si merece la pena seguir respirando, sigo siendo yo. Ya me he cansado de tus jueguecitos, del ahora si y mañana no. Las cosas no son solo cuando tú quieres. Este juego es cosa de dos y ya me he cansado de jugar siempre con tus normas. Ahora quiero jugar como a mi me de la gana. No me importa saltarme las reglas, a fin de cuentas es el único motivo por el que existen, para romperlas. Solo quiero olvidarte y recuperar las sonrisas sinceras, no las que fingen e intentan engañar al corazón. Ya estoy cansada de que por fuera todo sea perfecto y de librar yo sola esta lucha interior. Quiero sacar los demonios que se encierran dentro de mi. Quiero aparecer en tus pesadillas cada noche, para que no pase ni un día en el que dejes de pensar en mi. Quiero que sientas el dolor que un día me hiciste sentir.


lunes, 4 de febrero de 2013

Recuerda, amigos verdaderos solo uno de cada cien.

Hay gente que nos va dejando a lo largo del camino y gente nueva que entra en nuestras vidas. Habiendo dejado ya atrás el 2012, miramos hacia adelante. Yo lo hago sin arrepentirme de nada. Los que se fueron, quizás era porque no se merecían estar ahí y echarme la culpa de las cosas ni siquiera tiene sentido, ya que no me siento culpable. Cuando algo se destruye es porque no estaba destinado a durar. Dejar el pasado atrás es lo que se debe hacer. Como bien se dice, a lo hecho pecho y a vivir la vida que son dos días. No podemos quedarnos atrapados en el pasado, tenemos que aprender a seguir andando sin que nada ni nadie nos detenga nunca de conseguir lo que deseamos. Porque la fuerza de un deseo es irreprimible. Solo el amor es más fuerte que los sueños. 


domingo, 27 de enero de 2013

Es demasiado. Demasiados sentimientos. Demasiadas putadas. Demasiado amor. Demasiado tiempo. Demasiadas lágrimas. Demasiado todo. 

Cuando lo único que quieres y necesitas es mandarlo todo a la mierda de una vez por todas. Olvidar todo, cada momento, beso, cada mirada y cada pensamiento. Cuando ya no se lo merece y tú sigues ahí haciendo el idiota. Llega la hora de tirar hacia adelante, de dejar de verle, de mirarle, de pensarle. Se acabó. El sufrir, los malos ratos, todo. Voy a mirar hacia adelante de una vez y no volveré a mirar atrás porque con cada paso solo ha demostrado que no me merece. Será solo una parte de mi pasado a la que no quiero volver. Un recuerdo que pese a no querer olvidar tampoco quiero recordar. Alguien más a quien llegué a conocer pero que ahora es un extraño. Me prometo a mi misma que está será la última vez que escribiré sobre ti.